En las grandes ciudades, el tráfico suele representar un problema para todo aquel conductor que acude a zonas céntricas, comerciales o muy frecuentadas. Tal es el caso de la Plaza de Cibeles, en Madrid. Los conductores que por cualquier motivo, por ejemplo de carácter turístico, desean visitar esta plaza, deben resguardar su vehículo para que la visita se dé con la mayor tranquilidad. Cuando los ciudadanos van a realizar gestiones, acuden a eventos culturales o se desplazan a una zona por cualquier motivo, no deben perder el tiempo buscando aparcamiento. Sin la protección de un parking, el conductor se verá obligado a estar circulando para buscar un hueco, plaza que en muchos casos se encontrará en una zona aislada y alejada del destino del viajero. El estar dando vueltas para buscar aparcamiento, resulta no solo perjudicial para el propio conductor, sino también para otros, puesto que el tráfico empeora con la presencia de coches en busca de plaza.
Con un garaje vigilado cerca de la Plaza de Cibeles, la protección del vehículo y de lo que haya en su interior, se optimizará. Los delincuentes, vándalos y toda clase de individuos que deseen dañar su coche, no podrán hacerlo en un lugar constantemente vigilado por profesionales. El personal de vigilancia de los parkings actúa mediante visionado de circuitos cerrados de televisión y también con métodos de vigilancia tradicional.
Los vehículos se hallarán de esta manera completamente a salvo de cualquier acto delictivo, y también de otros factores perjudiciales, como por ejemplo la lluvia con restos de polución, las heladas, el granizo... Salvaguardar el coche en estos casos hará que ningún factor meteorológico pueda afectarlo. Y por otra parte, contar con un garaje vigilado también proporcionará ahorro en cuanto a sanciones de tráfico, situaciones que suelen darse cuando por prisa se aparca en cualquier sitio.
PARKING EN MADRID
DESDE 15€/DÍA