Las zonas turísticas son propicias para los robos, actos delictivos que también se darán en coches, sobre todo cuando se aparcan en solares o en lugares fuera del contacto visual de los viandantes o el tráfico. La mejor opción para evitar los robos es guardar el vehículo en un parking que ofrezca las máximas garantías de protección, habitabilidad para los usuarios... La protección del vehículo viene determinada por la calidad de los dispositivos de vigilancia instalados (cámaras, sensores...), y también por la cualificación del personal al cargo de las instalaciones.
Además de todo ello, los usuarios se beneficiarán porque con un parking, evitarán gasto de tiempo, a veces más importante que el absurdo derroche de combustible al tener que aparcar en la calle. Los turistas o ciudadanos de la propia capital que desean acudir a edificios de interés o a eventos culturales, han de hallar también tranquilidad en cuanto a la protección de su vehículo. Por otro lado, los coches, motos, etc., se verán protegidos de las lluvias torrenciales que caen en verano, acompañadas a veces de granizo grueso y consistente que rompe lunas y abolla carrocerías. Pregunte a los especialistas de los garajes sobre otras ventajas, así como sobre bonificaciones y el precio por horas, días o largas estancias.
